La clave de una recomendación de vino para todo gusto: algo rico que puedas compartir incluye una botella: ellas nunca están vacías y se llenan de historias.
¿Qué es lo qué más recomendamos?
Para empezar, haz este Test, te ayudará mucho a saber qué vino va a ir mejor de acuerdo a tus gustos. Será más fácil que después de esto vayas a nuestras recomendaciones.
Sí sueles comer más dulce…
Empieza con espumosos, con blancos, algunos tintos como el lambrusco serán dulces y los espumantes que sean Sec o Doux (que es muy raro encontrar estos últimos) son buena idea. ¿Asti? ¡También irá perfecto. La mayoría de los vinos dicen que son más dulces al momento de leerlo.
Otra idea son los tardos o vinos de hielo (IceWine o eiswein); eso sí, lo ideal es que esperes a los generosos hasta que tengas una buena costumbre de vino (generoso son los Jerez, los Pedro Ximenez: tienen la aclaración).
Muy ácido…
¡Somos mexicanos! Podríamos ponerle limón al limón. Si te gustan los vinos con mayor acidez, intenta vinos jóvenes: Españoles, Argentinos y Mexicanos que no pasen de los 6 meses en barrica.
Los blancos igual son opción: Chenin blanc, algunos chardonnay; verdejo si encuentran, queda perfecto.
Eviten los vinos que sean muy tánicos: tannat, cabernet sauvignon, Tempranillo.
Si amargo…
¿Eres de los que se comen el chocolate así, sin nada más? ¿De los que dicen que el mejor chocolate es el cacao tostado? ¿Al café no le pones nada de azúcar? ¡Eres de las personas que gustan de sabores amargo.
Ahora bien, a contradicción: el amargo en el vino puede (y suele ser) un defecto. Por lo cual la recomendación se va encaminada a que sea un vino más robusto, de potencia y cuerpo: busca de jóvenes a crianzas pequeñas: que no sean mayores a 1 año. ¿Por qué no vamos a irnos a grandes vinos de grandes reservas? Estas en pañales, apenas inicias en el vino, vamos por partes y luego lo compras.
A todo le echas sal.
¿Eres de los que cuándo sales con la novia, la mamá, la pareja, el primo, los amigos te dicen “¿En serio te lo vas a comer con tanta sal? Aparte de recomendarte que le bajes a la ingesta de sal, pruebes los vinos mexicanos de Ensenada. Sí, muchas veces se les acusa injustamente de sabores salados; pero la realidad es que los vinos que se encuentran cerca de costas y de mares tienen un nivel de mineralidad (como se le dice en términos correctos) mucho mayor. Y hay algunos vinos en Ensenada que pueden dar esas características.
¿Es defecto? Sólo en exceso, por suerte, la mayoría de los viñedos ya no tienen ese problema (ni en México ni en el mundo).