La Denominación de Origen para el charanda, bebida de caña elaborada en Uruapan y 16 municipios de Michoacán, fue otorgada hace 11 años y forma parte de los 15 productos con esa distinción, informó la representante del Consejo Regulador del Charanda, Miriam Pacheco Mondragón.
La ejecutiva de la Destiladora Uruapan, la más antigua del estado, pues funciona desde 1907, indicó que es un producto que se conoce en la región desde la Colonia, cuando los españoles introdujeron el proceso de destilación, y actualmente produce 20 mil litros al año.
La ingeniera química indicó que la caña de azúcar con la que se elabora esta bebida, que tiene entre 35 y 55 grados de alcohol, es de altura, pues se cosecha de mil a tres mil metros, y la denominación protege a los productores y destiladores en un área de 16 municipios de Michoacán.
De esta forma, los micros, pequeños y medianos productores de Ario de Rosales, Cotija, Gabriel Zamora, Nuevo Parangaricutiro, Nuevo Urecho, Peribán, Los Reyes, Salvador Escalante, Tacámbaro, Tancítaro, Tangancícuaro, Taretan, Tocumbo, Turicato, Uruapan y Ziracuarétiro tienen la oportunidad de certificar el cumplimiento de la norma y la denominación. Pacheco Mondragón resaltó, en entrevista telefónica, que esta situación se refleja en los índices de calidad del producto y permite mayor y mejor comercialización del aguardiente elaborado con la caña producida en esos municipios.
La especialista explicó que como parte del control de calidad, las destiladoras deben apegarse a un proceso que fija los grados de la bebida, las líneas y la calidad de reposado, blanco o añejo, en función de la norma.
Geográficamente el lugar de producción de la caña de azúcar para elaborar el charanda se encuentra alrededor del Cerro de Charanda, donde surgió una de las primeras destiladoras de la bebida en el estado en el siglo XVIII. Indicó que la función del Consejo Regulador del Charanda, del cual su padre Fernando Pacheco es presidente, es verificar que la producción se apegue a la Norma Oficial Mexicana (NOM) y cumpla con los estándares de calidad.
La producción en la entidad de los miembros del Consejo Regulador del Charanda asciende a unos 20 mil litros al año, de los cuales cinco por ciento se destina a la exportación y lo demás se comercializa en el estado, la Ciudad de México y otras entidades, refirió la entrevistada.
Explicó que la industria del charanda está en crecimiento y “ahora la gente reconoce las denominaciones y las valora, gracias al tequila y al mezcal, que son los dos productos más importantes dentro de las denominaciones de origen”. Pacheco Mondragón detalló que México sólo cuenta con regulación del tequila y el mezcal, pese a sus 15 Denominaciones de Origen. Indicó que hay productores del charanda en Michoacán; cacao, en el Grijalva; arroz, en Morelos; café de Veracruz y Chiapas; chile habanero en Yucatán; mango Ataúlfo, en el Soconusco, Chiapas, y vainilla de Papantla. Además, Bacanora de Sonora, el mezcal de Oaxaca, Sotol y el Tequila de Jalisco, así como la Talavera de Puebla, el Olinalá de Guerrero y el ámbar de Chiapas, todos pugnan porque sus productos puedan dar el paso hacia una norma oficial.
Indicó que su hermano Arturo Pacheco Mondragón y ella misma forman parte de los 125 productores de la Asociación Nacional de Denominaciones de Origen (ANDO), la cual pretende el control de calidad de los productos y apegarse a la norma.
La empresaria señaló que México tiene un gran potencial para desarrollar productos con denominación de origen que permitirían mejorar su posicionamiento en el mundo, pero el desconocimiento de los trámites que implica tener ese reconocimiento lo obstaculiza. Pacheco Mondragón enfatizó que “el camino que debe seguir cada Denominación de Origen es sensibilizar a las autoridades, mediante una gran labor de gestión, para lo que se requieren recursos”.
Refirió que la mayor parte de las Denominaciones de Origen no han visto avances, debido a que se necesita en todos los casos un proceso de certificación, el cual es en ocasiones muy costoso para los productores. Manifestó que los consejos del Tequila y del Mezcal son los que tienen mayores recursos y apoyan con personal, laboratorios y conocimientos técnicos a los otros consejos y fortalecen con recursos los esfuerzos de los demás productores en el país.
Además, los miembros de la asociación llevan a cabo una serie de ferias y exposiciones, con el fin de dar a conocer sus productos y solicitar el apoyo de las autoridades, así como difundir sus objetivos en la página de Facebook de la organización. “Las ferias las hacemos dos veces por año, en 2016 fueron en Uruapan y en Oaxaca, la próxima será en Villahermosa, Tabasco, y en 2017 en Bacanora, Sonora”, expuso.
Vía Notimex