¿Qué pasa si compramos un vino barato? ¿Es malo? ¿Para qué usarlo?
En muchos lados del mundo la producción de vino es tan grande que el vino realmente tiene un costo muy bajo.
Peor vamos a delimitar: en este caso vamos a manejar vinos de menos de $150.00 pesos como vinos baratos.
Existe en el mercado actual vinos de incluso de $60.00 pesos. Y de botella.
Para algunos, la opción de vino de caja no suena realmente agradable; sin embargo, para algunos es una agradable y económica opción para los fines de semana, las comidas informales o simplemente el momento del hogar: tienen un costo de $40.00 en promedio.
No podemos hablar de la calidad de un vino si no tomamos en cuenta el precio.
Es verdad, el precio no muestra la calidad de un producto en la gran mayoría de las ocasiones. Pero no podemos esperar que realmente tengamos un gran vino que sea casi perfecto y nos cueste menos de $100.00 (lamentamos decirles que así no es la vida).
Pero con el costo que estamos mencionando, de un presupuesto de $150.00, hay vinos de todo el mundo que podemos disfrutar por una excelente calidad.
¿Ejemplos?
Vinos Cavas. La mayoría de las cavas tienen un precio mínimo: gran proceso de producción y suelen estar entre los $100.00 y los $180.00 (sí, se pasa de ese presupuesto, pero en ese parámetro se encuentran).
La Redonda, Cousiño Macul y Freixenet tienen una línea económica que se posiciona en no más de ese precio.
España.
Pata Negra de Valdepeñas y Audiencia Reserva podrían ser opciones económicas. Beronia Crianza cuesta menos de $100.00; Rioja nos ofrece Campo Viejo y cuesta 5 pesos más del presupuesto.
Francia.
Georges Duboeuf tiene Beaujolais Villages, Sauvignon Richevin o Petit Bistro encuentras líneas económicas. También encuentras Chateau de chateauneuf en $100.00.
Espumosos.
En el mercado de vinos espumantes encontramos vinos desde los 80.00 hasta los 150.00 sin problemas. Los italianos, Astis y lambruscos son buena idea de economía y espumante. Si quieren vinos menos dulces, algunos argentinos y chilenos darán buen desquite: Trapiche, Santa Carolina, Freixenet y Undurraga son opcionales.
Nota: No decimos que todos los vinos baratos sean buenos, ni que sean malos. Decimos que para todo hay gusto y en algunos casos hay una buena relación entre precio y calidad.