Consumo de vino en México creció 10 por ciento durante 2016

*Con 59 por ciento, el vino tinto es el preferido por los mexicanos, seguido del blanco y el espumoso

El consumo de vino en México alcanzó 89.5 millones de litros en 2016, lo que representa un incremento de 10 por ciento, informó el director general de la Organización Internacional de la Viña y el Vino, Jean-Marie Aurand.

En la presentación del estudio “Panorama mundial del vino y oportunidades para México”, destacó que de los litros consumidos, 30 por ciento corresponde a producción nacional, lo que representa una oportunidad para la industria mexicana.

De acuerdo con la investigación, a pesar de que el consumo per cápita de vino en México es bajo (750 mililitros) en comparación con otros países como España (20 litros), Italia (37 litros) o Francia (47,7 litros), el crecimiento sostenido en los últimos años permite tener una visión optimista de que existe una buena oportunidad de negocio para los productores nacionales.

Y es que en 2015 la producción de vino en México fue de cerca de 20 millones de litros, cantidad que representa únicamente 0.07 por ciento de la producción mundial.

En cuanto a consumo, el informe estima que la producción nacional satisface únicamente el 30 por ciento de la demanda, por lo que el 70 por ciento restante se importa de países como España, Francia, Chile, Argentina y Estados Unidos, entre otros. Tan sólo en 2015, las importaciones de vino superaron los 220 millones de dólares.

“Como industria, tenemos el reto de crecer la producción nacional, representar los intereses de los productores y sobre todo promover el consumo de las marcas nacionales dentro del mercado mexicano”, afirmó el presidente del Consejo Mexicano Vitivinícola, Daniel Milmo Brittingham.

Respecto a las preferencias de los consumidores, el análisis indica que 59 por ciento privilegian el vino tinto, 14 por ciento el blanco, 12 por ciento el espumoso y el 15 por ciento restante se divide en las demás clasificaciones.

Baja California concentra cerca del 75 por ciento de la producción de vino, seguido de Coahuila, Querétaro, Aguascalientes, Zacatecas, Chihuahua, Guanajuato, San Luis Potosí, Puebla, Sonora y Nuevo León. En conjunto, se destinan cerca de cinco mil hectáreas al cultivo de uva para producir vino, según datos de Consejo Mexicano Vitivinícola.

“La población que consume vino en México sigue siendo aún reducida y como ya se ha señalado, no existe una cultura de beberlo a diario. Estimamos que existen dos millones y medio de mexicanos que los consumen, de los cuales un 80 por ciento lo toma una vez a la semana y sólo un 15 por ciento lo hace de modo diario”, explicó Aurand.

Por lo que a estacionalidad se refiere, el mismo estudio señala que es el fin del año el periodo de mayor compra de vino, permaneciendo más o menos constante durante el resto del año; mientras que marzo, abril y mayo son los meses en los que la adquisición es menos fuerte.

En el marco de la presentación del informe, se anunció también la segunda edición de “México Nación de Vinos”, que congregará a más de 75 bodegas de los 11 estados productores.

El encuentro, a realizarse el 20 y 21 de septiembre, busca beneficiar a todos los sectores relacionados: producción, distribución, difusión y consumo, razón por la que desplegará más de cuatro mil metros cuadrados de vino mexicano para generar diversas oportunidades de interacción.

Los asistentes podrán disfrutar de un museo interactivo, un paseo por los procesos de vinificación, talleres y conferencias especializadas para profesionales, así como de la participación de enólogos, productores y sommelier, quienes interactuarán directamente con los más de 2000 invitados.

Vía Notimex.

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¿Amar u odiar el Pinot Noir?

El Pinot Noir fue odiado tras la película Sideways por la razón más boba: el protagonista lo amaba y eso nos da razones para amarlo u odiarlo (algo parecido a lo que hizo con el merlot o cabernet).

es una de las cepas más usadas para la creación de vino: desde las denominaciones de origen (Como en Borgoña o en champagne) hasta vinos “libres”, que no tienen ninguna denominación de origen.

El nombre del pinot noir viene de la forma del racimo: como un pino negro y se encuentra plantado en casi todo el mundo: Australia, Estados Unidos, México, Argentina, y otras partes del nuevo mundo y en Francia e Italia principalmente del Viejo Mundo.
Y a pesar de ello y que crea grandes vinos, es una cepa complicada al momento de cultivar y al vinificar.

Generalmente, los vinos de esta uva, son fragantes, pero sin mucho color ni taninos rudos, como podría ser un cabernet o un tannat.

Para vinos espumosos como el champagne u otros que han seguido el mismo proceso, los tintos que conocemos, pinot noir es una opción ideal para aquellos que gustan de una buena copa por las tardes, ya sea solo o con maridaje.

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Chef mexicano crea la Semana GourMexique en Montreal

Primero fue La Semana del Taco, ahora el chef mexicano Fabián Enríquez ideó la Semana GourMexique, el primer festival de gastronomía mexicana de Montreal.

Del 22 al 29 de abril un grupo de reconocidos restaurantes mexicanos en Montreal sumarán esfuerzos durante una semana de celebración de la gastronomía mexicana, ofreciendo un menú de tres tiempos a un precio especial.

Enríquez llegó hace 15 años a Canadá, donde ha realizado estudios de cocina y repostería. El año pasado abrió junto con su esposa Beata Belfer, de Israel, el restaurante de comida mexicana “Mercado”.


 

En el otoño pasado realizó con éxito La Semana del Taco, durante la cual una decena de restaurantes mexicanos prepararon diferentes tipos de tacos con la única condición que fueran tacos suaves y “no con tortilla hecha tostada”.

Esta vez reunió a cinco restaurantes mexicanos que prepararán suculentos platillos gourmet con ingredientes y recetas mexicanas.


 

El chef aseguró que “la mayoría de la gente no lo sabe, pero la cocina mexicana ha sido declarada por la UNESCO como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad”.

Una de las especialidades de su restaurante es un taco de bacalao con tortilla de betabel, es decir que “la masa la mezclamos con el jugo del betabel y cerveza, lo que le da color y sabor”, detalló el chef.

Agregó que la comida mexicana “tiene mucho más que ofrecer además de los tacos y los burritos”.

Para esta semana su restaurante ofrecerá un platillo con salmón curado con tequila y una tártara de atún.

El restaurante El sabor de México ofrecerá un estofado de pollo con huitlacoche, mientras que los restaurantes Emiliano´s, La selva y Casa Figueroa prepararán aguacate relleno de atún, huachinango al mojo de ajo y quesadillas de champiñones, entre otras especialidades. El precio del platillo será de 35 dólares.

“México está muy orgulloso de su gastronomía y es consciente de la importancia del trabajo realizado por los restaurantes y chefs mexicanos para promover la cultura, los colores, la historia y la riqueza de México en el extranjero”, indicó el consulado de México en Montreal, que apoya esta iniciativa.


 

La representación diplomática señaló que el reciente auge de restaurantes mexicanos en Montreal es la prueba del interés que suscita la gastronomía de ese país y el amor de los quebequenses, incluso hacia su cultura.

Por Isabel Inclán. Corresponsal (Notimex).

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Tepotzotlán, pueblo con historia y buena gastronomía para todos los bolsillos

Tepotzotlán es un pueblo mágico con muchos atractivos, donde se respira el sabor a provincia y que por su cercanía con la capital del país, a solo una hora por carretera hacia el norte, resulta una muy buena opción para que los visitantes pasen un día inolvidable.
Los paseantes son recibidos con un enorme letrero que les da la bienvenida, mientras a lo lejos se ve la parte trasera del Exconvento de San Francisco Javier, considerado “el corazón” de esta localidad del Estado de México.
En cuanto empiezan a subir por sus calles empedradas, los paseantes encontrarán construcciones antiguas, fachadas de casas pintadas en tonos café y locales donde se venden artesanías, pinturas, macetas y flores, así como un buen número de restaurantes donde los jóvenes invitan a pasar para degustar cabrito, barbacoa o carnitas.

Al llegar a la plaza principal se muestra en todo su esplendor el Exconvento de San Francisco Javier, una joya de la cultura virreinal reconocido como monumento nacional y cuya iglesia ha sido declarada, desde agosto de 2010, Patrimonio de la Humanidad.
Es obligada la visita y la fotografía frente a la fachada del templo, el cual forma parte del Museo Nacional del Virreinato y ante el cual hay que darse tiempo para apreciar todas las esculturas y adornos típicos del churrigueresco mexicano.
Hay representaciones como “La gloria del matrimonio cristiano” y figuras de doctores de la Iglesia, evangelistas, del misionero mexicano San Francisco Javier quien fue martirizado en Japón, de San Miguel Arcángel y la Virgen María. Toda una belleza arquitectónica que no se puede uno perder y admirar.
Si la fachada es hermosa, la gente quedará maravillada con sus enormes cocinas, las pinturas, las esculturas y la propia construcción, sus arcos, pasillos, escaleras, patios y claustros, entre ellos “Los albijes” o “Los naranjos”.

En los jardines uno puede descansar debajo de los árboles frutales, respirar aire puro y después, seguir el recorrido del inmueble para terminar en el interior del tempo de San Miguel Arcángel, que definitivamente los dejará con la boca abierta.
Esta belleza arquitectónica construida entre 1670 y 1682, cuenta en su interior con diez retablos diseñados y elaborados por Higinio de Chávez y Miguel Cabrera a mediados del siglo XVIII.
Entre ellos están los dedicados a San Francisco Javier, la Virgen de Guadalupe, San Ignacio de Loyola, la Pasión de Jesucristo, San Estanislao de Kostka, San Luis Gonzaga y San Juan Nepomuceno, entre otros.
Esta riqueza en retablos es respaldada por murales y enormes lienzos firmados también por Miguel Cabrera, en los que están representados Dios Padre, el Espíritu Santo, el purgatorio y el patrocinio de la Virgen a los jesuitas.
Tras ese recorrido es momento de disfrutar de una buena comida y para eso Tepotzotlán “se pinta solo”.
Frente a la plaza central están los portales, que dan cobijo a restaurantes que ofrecen a los paseantes desde unas buenas enchiladas de mole, chicharrón, flautas y carnitas, hasta pancita, barbacoa y una buena carne asada, obviamente acompañada de una cerveza o michelada bien fría.
Junto a los portales se halla un mercadito de artesanías, donde los turistas se dan vuelo comprando todo tipo recuerdos mexicanos, ropa, huaraches, cinturones, pinturas, sombreros, bolsas y jarritos, entre muchos productos más y a muy buen precio.

También es posible visitar el kiosco, donde las personas pueden disfrutar un helado o un raspado, mientras escuchan a grupos románticos, tríos o estudiantinas, e incluso reír con los payasitos callejeros o mimos que, como en toda plaza turística, no pueden faltar.
Si se cruza la calle hay más arcos y restaurantes, aunque más exclusivos y caros, que además brindan la oportunidad de escuchar en vivo mariachis, grupos de música norteña o jarocha, encargados de amenizar la comida.
A escasos metros está la entrada al mercado popular, donde quienes prefieren las garnachas encontrarán una variada gama de antojitos mexicanos, principalmente quesadillas de masa verde con chicharrón, flor de calabaza, quelites, huitlacoche y un sinfín de propuestas más, sin olvidar los sopes con queso fundido o los tlacoyos de frijol y de haba.
También es tradición darse una vuelta por los puestos de barbacoa y pedir la “prueba”, un taco de barbacoa que seguramente por el sabor los hará pedir más, acompañados de un consomé con mucho garbanzo.
En ese ambiente del mercado popular va acompañado con los vendedores ambulantes de queso, nopales, chiles, habas, pepitas, dulces y postres, entre muchos otros alimentos y mercancías.
Para concluir con ese recorrido por “Tepo” hay que llevar a los niños a la explanada principal, para que corran, jueguen con los enormes globos tipo lápiz que ahí venden, que coman un elote, esquites, algodón de azúcar, nieve de agua, raspado o una paleta de hielo.
Si aún no están satisfechos con este paseo, los visitantes pueden visitar los Arcos del Sitio, una monumental obra levantada por la comunidad jesuita en la época colonial, a principios del siglo XVIII, que se ubica a 29 kilómetros de Tepotzotlán.
Allí también se puede comer muy rico, además de practicar actividades físicas como montar a caballo, subirse a la tirolesa o caminar por los senderos que rodean el enorme e impresionante acueducto.
Por Eleazar Ramos Villaseñor (Notimex).

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¿Somos aburridos para el vino?

Mientras en otros países beben vino nada más porque sí, en México seguimos con la pose de beber vino.

Aquí nos quejamos de los impuestos (y con justa razón): la carga hacendaria no permite un mejor consumo de vino y por lo cual, una mejor y mayor producción.

Todo lo que hablamos son catas y eventos.

Y los vinos son sensacionales, maravillosos, encantadores y más sinónimos.

Y nos parece novedoso hacer maridajes “arriesgados”

Mientras en otros países solo lo toman…

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Tener una cava… ¿Es algo realmente necesario?

Si eres un consumidor de vino, esta puede ser una duda común en tu campo… ¿qué hacer con el vino, cómo guardarlo?

Una realidad es que las cavas son para grandes cuidados: ¿cuántos vinos piensas meter? No vale la pena hacer modificaciones en tu casa si tu plan de compra de vinos es de dos o tres al mes, los mismos que consumes.
En este caso, lo mejor es tener un refrigerador o zona destinada a lo mismo.

La razón para tener una cava es cuidar el vino a largo plazo, su almacenamiento sea el correcto y pueda tener un propio envejecimiento.

Es entonces cuando tener una cava es necesario para ti: un espacio designado para tus botellas, sean vino y destilados, donde no haya aromas y sea una temperatura constante (de preferencia de manera natural para no tener energía en uso constante), que no tenga luz directa a las botellas y sea ventilada.

Esto es para las personas que buscan realmente tener botellas guardadas para más de 5 años y en volúmenes de mínimo 4 botellas (mínimo).
Mientras más sea la colección de vino, más grande debe ser el espacio y los cuidados.

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Presentan ‘Iniciativa de Ley General de Fomento a la Industria Vitivinícola’

El secretario de Turismo del Estado de Guanajuato, Fernando Olivera Rocha estuvo en la presentación de la ‘Iniciativa de Ley General de Fomento a la Industria Vitivinícola’ en el Senado de la República Mexicana.

Esta Ley tiene por objetivo impulsar, fomentar, promover y difundir las actividades relacionadas al desarrollo del sector vitivinícola mexicano en concordancia con la Ley Federal de Desarrollo Rural Sustentable para impulsar una mayor productividad y competitividad en el mercado interno.

Lo anterior, con participación de los tres niveles de Gobierno con el apoyo de las organizaciones de la sociedad civil, los consejos nacionales, Comités Estatales de Sistema Productivo Vid y en general de los productores vitivinícolas.

 

El proyecto legislativo plantea la definición de “Vino Mexicano”, como el producto 100% de uvas plantadas, cultivadas y cosechadas de origen mexicano que será fermentado y envasado en su totalidad en territorio mexicano.

Durante la sesión se dio a conocer que para la integración de esta Ley se realizaron 5 mesas de trabajo desde el mes de mayo de 2016. En coordinación con el Consejo Mexicano Vitivinícola A.C. se realizaron 4 reuniones de trabajo en los estados de Guanajuato, Baja California, Nuevo León y Coahuila, que representan el 92% de la producción vitivinícola nacional.

Dichas mesas se integraron con los siguientes temas: Mesa 1.- Producción y Desarrollo Tecnológico, Mesa 2.- Financiamiento, Mesa 3.- Producto, promoción y comercialización, Mesa 4.- Aspectos Fiscales, y Mesa 5.- Aspectos legislativos.

El sector vitivinícola en el país genera alrededor de 7 mil empleos directos e indirectos. En 2015 la producción fue de casi 20 millones de litros, de acuerdo con datos del Consejo Mexicano Vitivinícola A.C. y la Organización Internacional de la Vid y el Vino, con un crecimiento anual en su consumo 8% entre 2013 y 2016.

 

En total son 11 estados donde se produce uva, es decir: Guanajuato, Baja California, Coahuila, Querétaro, Chihuahua, Aguascalientes, Zacatecas, San Luis Potosí, Puebla, Sonora y Nuevo León que en su conjunto integran 5 mil hectáreas al cultivo de uva.

En Guanajuato la actividad vitivinícola ha mostrado un notable incremento, ya que en 2010 se contaba con 62.5 hectáreas y en 2016 alcanzó las 350 hectáreas, para 2020 se pronostica llegar a las 700 hectáreas.

Anualmente en la entidad se producen más de 100 mil botellas de 23 etiquetas en más de 350 hectáreas en 19 viñedos que ofrecen 24 variedades de uva.

La “Iniciativa de Ley General de Fomento a la Industria Vitivinícola” contempla la Integración de la ‘Comisión Nacional de Fomento a la Industria Vitivinícola’ que será un órgano público y de consulta, regida por las disposiciones de esta Ley y su reglamento, como organismo competente para conocer y dotar de la información pública relativa al sector para el diseño de Políticas Públicas, que dependerá de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) y la Secretaría de Economía.

Además de estas secretarías la comisión estará integrada por los titulares de las Secretarías de Gobernación, Hacienda y Crédito Público, Relaciones Exteriores, Turismo, Educación, Medio Ambiente y Salud.

El mercado del vino en México va en incremento, con un valor aproximado de 27 mil 500 millones de pesos de acuerdo con Euromonitor. La producción nacional del vino representa cerca del 30% del total consumido, por lo que el incremento de la demanda se satisface principalmente con un aumento de las importaciones, superando en 2015 los 220 millones de dólares.

Sin embargo, el peso de la industria vitivinícola mexicana en el mercado ha aumentado del 25% en 2012 al 30% en 2013 y al 35% en 2014.

 

Lo anterior demuestra que el sector de vino en México mantiene una tendencia de crecimiento, lo que representa una gran oportunidad para los productores de vino nacionales.

Publicado por Secretaria de Turismo

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El frapucchino de unicornio.

Ya llegó y es de Starbucks: Si los unicornios se han puesto de moda últimamente, tal vez esto derribe ese tren del mame con este frappe ácido y dulce.
Para algunos es momento de broma al respecto, pues el sabor, para algunos, no es agradable.

Para otros, el punto es la cantidad de azúcar que este contiene y lo “poco sano” que es la bebida… como si los demás productos de Starbucks fueran veganos, sin azúcar, madre y padre a la vez.

Para otros, es parte de la moda que ya estaba en la cabeza de todos (¿Entendieron el chiste? ¿No? ¿Seguros?).

Pero… ¿Es en serio que se acabó? La demanda de este producto va por dos lados, por los que quieren probarlo para amarlo y los que lo compran para decir lo mal que sabe.

¿Será pasajero? ¿Durará esta moda? ¿Será el de temporada de cada año como el pumpkin de noviembre?

 
Y hasta olvidamos los supuestos ideales.


Y al final, ¿Lo probaremos o no? Porque… ¿Importa lo qué lleva?

 
*Lo importante no es como entra, sino como sale*
 

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