Qué vino va para tu humor.

¿No sabes qué vino tomar?
Estas son las recomendaciones que te dejamos para que disfrutes tu buen (o mal) humos con una copa de vino.

Tristeza.
Ya sientes que el mundo no te aguanta, que debes cambiar de aires; que tu novix no te quiere, que el perro te huye y que el jefe no anda a gusto con tus cosas.
Tranquiliza el ansia, haz unas bolitas de melón y agrega algo de jamón serrano; una buena copa de tempranillo, malbec o banarda para dar un buen momento y darte cuenta que nada es tan importante como disfrutar un espacio para ti.

Satisfacción/bienestar.
¡Todo es bello!
La calle es bella, la música es buena, la plática increíble, el amigo que te gusta te hace ojitos (o el novio y tú andan en esa racha sobre las nubes) ¡Felicidades! ¿Cómo completas con una copa de vino? Algo de pan tostado con un poco de queso mozzarela y un pinot grigio o un clásico sauvignon blanc. Festeja ese momento, esa felicidad, que nada más te importe.

Enojo.
¿De nuevo ese cliente? ¿En serio tu mamá sólo llamo para eso? ¿Cómo qué tu novix hizo qué?
¡Basta!
Toma los 5 minutos que te mereces, agarra una copa de vino; un espumoso y huye a tu rincón favorito. Siente las burbujas y deja que ese enojo se vaya: Sí, el cliente es así; sí tu mamá también; puedes cambiar de novio; el trabajo no va a terminar con tu vida a menos que lo permitas.

Cansancio.
Estas cansado, la semana fue pesada, el momento incómodo. Es más, es viernes, tus amigos van a salir y la verdad no puedes ni caminar.
Llega a casa, quita los zapatos (si eres mujer, el sujetador; si eres hombre, la corbata) y agarra una copa de merlot o malbec. Sólo ve y disfruta lo que Netflix tiene para ti.

Melancolía.
Lo extrañas, lo sabemos. Es necesario un cambio (siempre es bueno); esa lluvia no ayuda. ¿Qué sigue?
Una copa de cabernet sauvignon, un corte de carne y sentirte reconfortado.

Enamorado.
Sólo agarra dos copas, la mano de esa persona, una botella de vino y lo demás sale sobrando.

Compartir

También te puede gustar