¿Vas a un restaurante y necesitas sugerencias rápidas? Veamos cuales pueden ser buenas opciones.
- Aperitivo.
El Chardonnay siempre es la opción; o al menos eso lo hemos convertido. La mayorñia de los aperitivos son sencillos; o incluso en lo que esperas tus alimentos, una copa de blanco puede ser una gran idea y el chardonnay también.
Gamay si es tinto.
¿Quieres algo tinto y no se te ocurre cuál?
Gamé (así se pronuncia, se escribe gamay –y sí, le puedes decir “gamay”-) es un buen vino, con poca tanicidad y de grandes aromas que irá perfecto en lo que esperas tus platillos.
- El plato fuerte.
Piensa bien en lo que vas a querer. Mientras más fuerte el plato, un vino más robusto: de blancos a tintos. Pregunta la recomendación de acuerdo al platillo que vayas a pedir.
- El precio.
Si lo importante es el precio, revisa primero el costo por copeo y por botella. Si van más de dos personas, suele ser preferible pedir por botella que el copeo. Revisa lo que vaya de acuerdo a los platillos generales o pedir para compartir.
Es mentira que necesitas irte al vino de “en medio” –el que no es tan caro, pero tampoco tan barato-. Ve por el que más te guste, cuidando tu economía.
Extra. Espumante.
Va con casi todo y siempre, lo malo es que les suelen subir el costo más que otros vinos; Evitando carnes, es una gran opción.