Para entender mejor al gran vino.

Esta es una lista memorizada para identificar mejor un vino, los sommeliers la tienen presente y es con lo que distinguen qué es lo que encuentran o notan dentro de un vino y cada una de sus cualidades. En esta lista, casi de manera mental, muchos de ellos encuentran la cantidad de azúcar, ácido, taninos, alcohol, miden las caudalias, si llega o no a contener fruta, tierra madera, complejidad, equilibrio.

Simplificado: vamos a ver el color del vino, entender el sabor que encontramos en él y el clasificaremos el olor.

Color: Vamos a manejar tonos y matices. Se miden dos aquí: el ribete y el centro del vino. Con ello vamos a dar dos aclaraciones al entender el vino, las clasificaciones más comunes son transparente, blanco,  amarillo, amarillo paja, amarillo pálido, amarillo Dorado, ámbar, gris, piel de cebolla, rojo, rojo rubí, rojo carmín, rojo escarlata, rojo morado, morado, púrpura, granate, rojo teja, marrón.

Estaremos sintiendo en nariz todos los aromas que nos recuerdan algo y los vamos a clasificar de la siguiente forma:

Afrutado: grocella, cereza, ciruela, moras, guayaba, melón, naranja, kiwi, etc.

Especiado: canela, pimienta, vainilla, etc.

Herbaceo: espárragos, hierva recien cortada, etc.

Con defecto: quimico, jabón, alcachofa, acorchamiento, moho, acético, etc.

En boca: Aquí, aunque vamos a describir muchas veces los sabores en relación a lo que olemos, la verdad es que solo hay 4 sabores: salado, dulce, ácido y amargo.