A esto nos referimos a que el vino esté acorchado, amargo o no a la temperatura adecuada.
- Si está acorchado.
Si tienes duda del vino, puedes probar otro de la misma marca y cepa para verificar. En caso de que no se encuentre en buen estado, puedes devolver la botella sin problema.
- Amargo.
Si sabes que ese vino no está como debe de estar, lo preferible es regresarlo; en este caso puedes pedir otro igual o cambiar de vino.
- Temperatura.
Tu vino está muy frío: esperar a que se ponga a la temperatura adecuada. En algunos casos puedes calentar el vino con la mano mientras está en tu copa (algunos ortodoxos del mundo vinícola te dirán que no, pero puedes ignorarlos).
Si está a una temperatura mayor a la de servicio, puedes pedir que te lleven hielo para meter la botella y enfriarlo; en caso de que no tuvieran, meterlo al refrigerador (unos 10 minutos serán suficientes para que quede listo.
Nota: No es válido que “probando” la botella, cuando está a menos de la mitad decidan devolverla por “no estar en buen estado”, es por ello que muchos lugares te dan a probarlo en un principio y ya que has decidido que el vino es de tu agrado y no se encuentra en mal estado, lo puedes seguir tomando, sin necesidad de que lo termines y digas que “no estaba bien”.