Para los más puristas, hablar de tacos con vino es grosero y peor tantito, con una denominación de origen y más la de Rioja (Calificada en España, para acabar con la historia)…. Pero ¿se atreverían a esta combinación?
Y no nos referimos a una opción para neófitos, sino realmente amantes del vino y dirigida por los mismos.
Los sommeliers educadores de Rioja, Pilar Meré, Claudia Ibarra y Marcos Flores, abrieron el festín dirigiendo unas palabras a los asistentes. Pilar Meré invitó a todos a crear sus maridajes respetando la pauta y estilo de cada taco, el gusto de cada persona es subjetivo y por lo tanto único. La sommelier Claudia Ibarra expresó que lo importante de experimentar es crear un gusto propio donde se mariden perfectamente los alimentos con el vino. Por último, el sommelier Marcos Flores expresó que más allá de las cualidades en la identidad de los vinos de Rioja, lo más importante es el encuentro en nuestro paladar de ellos con los platillos.
Los educadores de Rioja prepararon una serie de opciones o sugerencias de estilos de vinos tintos, blancos y rosados, y por supuesto con la presencia de las cuatro categorías de los vinos de Rioja: Garantía de Origen, Crianza, Reserva y Gran Reserva; una maravillosa gama de vinos para acompañar tacos al pastor, de camarón, barbacoa, suadero, chilorio, carnitas, canasta y los de villamelón.
Cada vino contenía la razón de su propuesta; que si el platillo tenía mucha grasa pues habría que buscar un vino con la estructura tánica suficiente para que cada mordida y sorbo tuvieran un encuentro agradable en el paladar, que si la acidez y frescura del vino acompañarían los tacos de camarón y ayudarían un poco a soportar la calidez de la temperatura ambiente.
El descubrimiento de los vinos rosados que maridaron muy bien con los tacos al pastor, por supuesto con piña, fue la plática en la mesa de todos los comensales. La experiencia dio un giro cuando los tacos se bañaron con salsas de espectaculares colores e intensidades en el sabor, elaboradas con chiles picosos, ahumados, rojos, verdes, salsas untuosas como el guacamole, cambiando radicalmente la propuesta de maridaje; el toque que las salsas daban al conjunto resultó un factor más en la elección de la mejor armonía, generando sorpresas en el paladar.
Vía DO. Rioja en México.