Blanco y negro se unen en las capas de estas barras: Una rica base de chocolate y –más- abundante chocolate rodean una capa de cremoso cheesecake.
Taco de lechuga con pato confitado y quinoa
Los cortes con el vino.
La razón por la cual los cortes de carne maridan bien con el vino ¿la sabían? Si no, aquí les tenemos la respuesta.
Pies (pays) y vino.
Maridajes dulces poco usuales que en el día del pay (3.14…) puedes degustar (o cualquier día).
Pasta con camarones al chipotle
Para una tarde con buen sabor y antojo, esta puede ser una opción.
Ingredientes
250 gramos de linguini o espagueti
Sal, al gusto
1 cucharada de aceite de oliva
2 dientes de ajo, finamente picados
500 gramos de camarones, pelados y desvenados
2 cucharadas de tequila reposado
1 taza de espinacas frescas
1 taza de crema de leche
2 chiles chipotles en adobo, o al gusto
Sal y pimienta al gusto
2 cucharadas de queso parmesano recién rallado
Modo de preparación.
Llena una olla grande con agua, agrega sal y hierve a fuego alto. Agrega la pasta cuando esté hirviendo, y cocina al dente (hasta esté cocida, pero aún firme), aproximadamente 11 minutos. Escurre bien.
Mientras la pasta se cuece, calienta el aceite de oliva en un sartén a fuego medio. Agrega el ajo y los camarones, y fríe durante 2 o 3 minutos, hasta que los camarones tomen un tono rosado. Reduce el fuego a bajo, agrega el tequila y las espinacas. Mueve de manera constate y permite que se evapore.
Licua la crema con los chiles, su adobo y sal, hasta tener una mezcla homogénea. Vierte sobre los camarones, revuelve y permite que todo se caliente a fuego bajo sin dejar que hierva. Rectifica la sazón y, si es necesario, agrega sal.
Vierte la salsa sobre la pasta escurrida, mezcla muy bien y sirve inmediatamente. Agrega pimienta al gusto y espolvorea cada porción con 1/2 cucharada queso parmesano.
Puedes acompañar con vino blanco, rioja, verdejo o un espumoso –de preferencia método charmat-.
Unas 6 básicas reglas de maridaje.
Vamos a irnos con el gusto de comer bien y por lo cual, disfrutar la bebida que vamos a tener a un lado de nosotros. Estas son algunas de las reglas básicas para crear verdaderos maridajes –ya sea de contraste o de armonía y que les va a ayudar mucho.
La acidez va con acidez.
La manera de cuidar la acidez es con acidez: si tu vino tiene un alto nivel, busca alimentos que sean ácidos.
Desde vinos tintos a blancos (que muestran más su acidez), a comida con limón –por poner un ejemplo- van a ser buenos compañeros de comida.
A más tanino, más grasa.
Mientras más grasosa sea la carne, más potente debe ser el vino con el que vas a acompañar esa comida. Busca opciones que tengan más barrica y que estén más envejecidos –más no pasados-, dependiendo lo que comas: quesos, carnes, salsas.
Pescado con ácido.
A mayor acidez del vino, le irá mejor el pescado: no es porque el vino blanco sea blanco, es porque su nivel de acidez va bien con el pescado (y el limón que le solemos poner).
Si es un pescado con salsa de queso, podemos ir por un tinto.
Maridar los sabores dominantes.
Son las salsas lo que se marida más que el contenido: si es un pato en salsa suave no lo vamos a maridar igual que un pato en salsas pesadas; lo mismo con todos los platillos.
De acuerdo a lo predominante, harás el maridaje.
Picante necesita azúcar.
Pueden hacer el ejemplo de un platillo con picante y ponerle taninos robustos para dejar de sentir la lengua.
Es por eso que la idea de champagne o cavas es favorable: más dulces.
El Alcohol va a hacer más marcado el picante.
Vamos desde un muscadet a un gewürztraminer o riesling.
Dulce va con dulce.
Si tu vino es dulce, que tu platillo también lo sea –y enfría bien ese vino, no lo tomes caliente por NADA del mundo, revisa la mejor temperatura-.
Donde comprar todo para un día de campo.
Cada vez tomamos más vino (¡sí!), comemos mejor (¡Yeah!), tenemos más y mejores amigos (más onomatopeyas de felicidad) y por eso planeamos algo alegre con los amigos, como un picnic.
¿Recomendaciones para comprar?
Antojos y maridajes.
El vino y sus referencias gastronómicas parecen enormes y suficientes; a veces, la manera de guiarse es por las salsas o lo “pesado” que puede ser un platillo; este es un ejemplo de como manejar cada combinación de manera sencilla y rápida.
Elige tu postre, te recomendamos el vino.
Ante las diversas opciones de postres, algunos de los vinos que más nos gustan pueden ser una buena opción para cerrar una cena o cumplir un antojo.
¿Alguno de estos es el tuyo?
Salmón a la pimienta.
Para una comida práctica y rápida que puede ser acompañada por un vino tinto joven para tardes de amigos o una cena sencilla.
Ingredientes
4 lonchas de salmón con piel
1 cuchara de pimienta fresca molida
1 cucharada de aceite o mantequilla
ralladura de limón amarillo
Sal
Modo de preparar.
En un asados o charola para el horno, poner aluminio con mantequilla o aceite.
Poner las lonchas de salmón (con la piel hacia abajo).
En un bowl poner la pimienta con la ralladura de limón y sal.
Mezclar bien y poner sobre el salmón.
Meter al horno por 15 minutos o hasta que dore. No debe pasar más tiempo.